¡Mi competencia está copiando mis acciones de marketing digital!

¡Alarma! Está es la actitud que surge de muchos de los empresarios con los que trabajamos, cuando su competencia comienza a desarrollar actividades de marketing digital, en donde se nota descaradamente que lo hacen como una reacción directa de lo que está sucediendo en su organización.

Si su competencia trata de copiarlo, no responda, evolucione.

¿Qué hacer ante esta situación?

La respuesta es muy simple: NADA.

¡Juan, pero es que hasta me copiaron los textos que tengo en mi sitio web! – replican constantemente los empresarios preocupados al ver clonadas o imitadas sus acciones de marketing, pensando en que esto se constituye en una acción ilegal. Pese a ello, lo primero que hay que entender frente a este síntoma es algo simple: De eso se trata la competencia.

Si esto le ha pasado o le está pasando, o incluso si le llega a pasar, tengo algo muy importante que decirle: ¡Felicitaciones!

Usted ha logrado que un elemento importante en el desarrollo de su negocio y del mercado, ponga los ojos en usted. ¿Usted copiaría algo que sabe que está mal hecho?

El hecho de que la competencia ponga los ojos en su acciones y en la manera en la que está actuando, quiere decir simplemente que hay algo que usted está haciendo bien, y que verdaderamente está llamando la atención. Mi primer consejo ante ello es claro y muy puntual: No se detenga.

Entienda que el marketing es un elemento de su organización sujeto de una dinámica rápida y agresiva. Las acciones que se ejecutan, son susceptibles de ser imitadas si resultan llamativas (no necesariamente exitosas), pero a la vez susceptibles de ser mejoradas y optimizadas, y es allí en donde usted necesita actuar.

Me resulta muy común encontrar un comportamiento en muchísimos empresarios, asociado con el hecho de que una vez que encuentran una acción de marketing que les funciona, se detienen y comienzan a repetir la misma acción una y otra vez. No me mal entienda, claro que si algo funciona hay que seguirlo usando, el pecado es dejar de buscar y suponer que esa acción -es la que a mi me funciona- y que aparte de eso no habrá nada más.

Los empresarios en este momento, necesitan mantener una dinámica veloz en cuanto a la lectura de sus resultados y en cuanto a las opciones que están a la mano. No me venga con el cuento de que usted nunca le da un vistazo a la comunicación que desarrolla su competencia, y si realmente no lo hace, mal.

Internet cambió la forma de pensar de todos nosotros y de la industria en general. Todo está a la mano y todo es sujeto de ser utilizado para nuestro bien, lo que hay que hacer, es asumir una posición estratégica y comenzar a evolucionar, comenzar a entender que si se queda quieto, su competencia no solo lo puede copiar, sino que puede crear una versión mejorada de usted mismo, y en este momento, sí que hay que preocuparse.

El marketing digital, es un escenario de plantillas, de recursos que están supuestos a ser utilizados y adaptados al esquema de cada estrategia. Las viejas discusiones acerca de los derechos y del plagio quedaron atrás, y usted solo brilla en los momentos en los que es eficiente para comunicarse con ese mercado que tanto necesita de usted.

Ahora se vale comprar en nombre de su competencia en Google AdWords, se vale hablar de ellos y compararnos en nuestras acciones offline o en nuestra estrategia de email marketing, ahora se vale trollear en las redes sociales si es que mis derechos como comprador no son respetados o si es que mi competencia está haciendo algo en contra de la ética del negocio (aunque no le recomiendo mucho hacer algo así, pero se vale), de tal manera, que si usted espera un escenario justo e ideal en el cual desarrollar su negocio, se encuentra en el planeta equivocado.

Tampoco guíe su estrategia basado en las acciones de su competencia, no reaccione necesariamente a lo que ellos hacen y si lo hace, valide que haya una alineación de sus acciones asociada con sus objetivos estratégicos, no haga las cosas y mucho menos invierta dinero en acciones solamente basado en reaccionar respecto de las acciones de la competencia.

Destaque siempre en sus procesos de comunicación sus ventajas competitivas y el conocimiento acerca de la problemática de sus clientes.

Usted necesita un alma propia

No se deje llevar por el hecho de que lo copien y tampoco se fije tanto en las acciones de su competencia. Su compañía necesita generar su propio carácter, su propia identidad. Preocúpese verdaderamente por satisfacer las necesidades de su mercado objetivo y por resaltar en su comunicación los beneficios de sus productos y servicios y el conocimiento que usted como profesional y como compañía tiene acerca de su necesidad. Si quiere prestarle atención a alguien, préstesela a sus clientes, y aprenda qué es lo que ellos en realidad necesidad y esperan de usted y de su organización.